La experiencia en Tokio ha sido maravillosa al encontrar con una counidad viva y dinámica. Además una excelente acogida por parte de los sacerdotes Jesuitas y la responsable de los FM, Yliana Takeda, quien ha hechoo un trabajo maravilloso al difundir la Espiritualidad del Agradecimiento en el minoritario catolicismo japones.